Thursday 30 April 2020

Días 40 al 46: Abril invisible, Mayo renaciente.

Abril, un mes primaveral protagonizado por lluvias y sol a partes iguales con temperaturas que ya van siendo muy agradables, un mes que "va invitando" a las cañas en las terrazas, al ejercicio al aire libre, a los paseos...un abril que este año se ha mostrado muy diferente...un abril que, ahora que ya casi ha pasado, se antojaba como presente y ausente a la vez, en pausa...
"Abril, has sido raro, atípico, lo siento pero tengo la sensación de que nos debes algo, bueno mejor dihco, que nos debes mucho...el año que viene te esperamos doblemente para darnos todo lo que nos has dejado pendiente"



...

    El final de nuestro "atípico" Abril, en estas últimas semanas, han sido una sucesión de los "soplos de aire fresco" que os comentaba hace unas semanas. Una sucesión de "respiros" y "oasis" a la situación que ya hace más de un mes, nos está obligando a vivir, nuestro querido compañero.

    Esa situación, ya de por sí desagradable, a la que se le ha unido últimanente el "mar sinfín de trabajo" que me ha tenido toda la mañana y - en ocasiones - gran parte de la tarde, hasta los - ya tradicionales- aplausos a las 8 de la tarde...que ha hecho que esos "respiros" a los que antes me refería cobren aún más significado y supongan más - si cabe - chute de motivación para seguir en un "túnel" en el que ya, al menos, podemos ver la luz de su final.

    Una luz "materializada" en una serie de noticias que se van alejando del pesimismo generalizado de los primeros días, que no ayudaba nada a nuestro intento diario de ser optimistas para superar esta situación lo más "airosos" posible. Y es que, hace aproximadamente una semana mientras mi rutina diaria de teletrabajo se desarrollaba con total normalidad en el despacho improvisado de mi salón, mirando por el "rabillo del ojo" la televisión a la que llegaban noticias bastante positivas que relataban que comenzabamos "doblar" esa curva de contagios que tan protagonista ha sido este último mes. 

    Junto a esa curva también iban descendiendo las muertes, que pasaban de los casi 1000 a los que llegamos en un fin de semana a, en un primer momento...600, 500, 400, hasta llegar a estos días en torno a los 300 que, aunque aún es un dato muy elevado ya es mucho más esperanzador que los datos de inicio.

    Con todas estas buenas noticias, como he dicho, el día a día últimamente se ha hecho más fácil, es cierto que la situación, por el momento, era exactamente igual que al principio pero parecía que nos ibamos acercando levemente a lo que parecía ser el final de esta experiencia, con estas sensaciones,los "medidores" de miedo e incertidumbre (al menos los de los míos y los que me rodean...).

   Todas estas noticias que nos daban sensación de alivio, en el terreno nacional, iban acompañadas de noticias de la misma naturaleza, en el terreno familiar...pues nuestra rutina diaria daba un vuelco hace aproximadamente dos semanas cuando recibimos el "negativo" de la última prueba PCR a la que se sometía mi madre con el objetivo de reincorporarse nuevo al trabajo. 

    Esto provocó que, en prácticamente cuestión de dos días, nos encontráramos (mi hermano y yo) con la casa para nosotros en el espacio de la mañana, ya que mi padre también se había incorporado unos días antes a su puesto de trabajo...esto me volvía a producir  una sensación "extraña", mezcla de "respiro" por el necesario flujo de gente en la casa y la desconexión de unos y otros, pero por otro lado cierta sensación de "tristeza" o "nostalgia" al pensar que la vida familiar las 24 horas,  que nos había permitido revivir esta experiencia, quizá, ya iba a producirse en pocas ocasiones más que las vacaciones juntos...

    Sin embargo, esas malas sensaciones en mi mente, duraron poco - producto de la montaña rusa en la que aún me encuentro subido y porque dirigí la atención en otro sentido, ya que todo indicaba que las consecuencias de las noticias esperanzadoras en el ámbito nacional - que antes os indicaba- no tardarían en llegar...y ¡asó fue!, pues en cuestión de días se anunció el cierre de gran mayoría de los hoteles "hospitalizados" de Madrid, la morgue instalada en el Palacio de Hielo o el inminente cierre del Hospital bautizado como "milagro" ubicado en el recinto de Ifema...los "frentes de guerra" iban deshaciéndose, poco a poco...

    Además, el gobierno iba acercándose a lo que iba a ser la "desescalada" tomando la primera de las medidas para "desconfinar" a la población: la salida de los más pequeños que llevaban más de unos meses "ente cuatro paredes" una medida que fue polémica antes y después de ser aplicada. Antes, ya que había voces que se cuestionaban esta necesidad de los niños y niñas y lo adecuado que iba a ser ya que a jucio de algunos/as iba a suponer un nuevo repunte de contagios y después dado que las imágenes de lugares públicos llenos de familias se repetían por doquier en las redes sociales acompañadas de mensajes incriminatorios debido a que no habían sido responsables, dando el paseo sin distancia de seguridad y otras medidas necesarias como llevar mascarilla y guantes.

   Personalmente creo que la medida fue muy adecuada y que las imágenes que se distribuían por las redes sociales eran "anecdóticas" y no respondían a un comportamiento general...tanto es así que los días posteriores esta situación se relajó bastante.

    Niños y niñas junto a familias fuera, quedaba saber cómo iba a ser el proceso de desescalada (fechas, condiciones, actividades permitidas, etc.), atisbo que llegó hace menos de una semana con la grata noticia de que sería el 2 de Mayo el ansiado día en el que (¡por fin!) podríamos salir el resto de la población a dar un paseo o hacer ejercicio. 




    No obstante, experimentados ya en el terreno de las noticias "fake", tratamos de ser prudentes y no nos hacernos demasiadas ilusiones, hasta que unos días más tarde el Gobierno comparecía para presentar un "plan de desescalada" - que ni el descenso del Everest - en cuatro fases cuyo recorrido en las distintas Comunidades autónomas, dependería de la evolución de los contagios pero que dejaba definitivamente claro que la noticia del 2 de Mayo era cierta. 










    Ahora nos enfrentamos a un objetivo claro, el 2 de Mayo, día en el que, por rangos de horas, podremos disfrutar de paseos y ejercicios, todo ello rodeado de -los muy añorados - árboles, sol, parques, edificios...que sustituirán a los muebles, mesas y demás mobiliario y "background casero" que suponían el escenario más usual de la totalidad de las actividades de nuestro día a día...en fin, el exterior vuelve a formar parte - de primeras, de una forma tímida para ir protagonizando cada vez más en nuestros días - hasta llegar a una normalidad que, desde luego, se antoja muy diferente a la que estábamos acostumbrados...una normalidad que, a día de hoy, aún se presenta muy lejana.




     En definitiva, hemos vivido un final de Abril con sabor a esperanza, que nos anticipa un Mayo de cambios...lentos pero, en definitiva, cambios, que es algo que necesitábamos muy mucho y que si vamos encajando bien y con responsabilidad quizá den paso a un final de Mayo de "renacimiento" en el que poco a poco vayamos instaurando la nueva normalidad de la que hablabámos y que nos dejará un mar de dudas resueltas, ahora pululando por nuestras "cabezas confinadas".

Thursday 23 April 2020

Días 36 al 39: Educación en tiempos de pandemia.

"Tan, tan, taaaan,tantantan,taaaaaaaan, pampam"
(Síntonía de cabecera de programa de radio)



¡Buenos días! Soy Mateo Odiel y un día más estoy con vosotros y vosotras de buena mañana para comentar la actualidad como venimos haciendo cinco años pero,como ya sabeis desde hace algo más de un mes, lo hacemos desde casa. Hoy me gustaría empezar contandóos una realidad social que nos está rodeando en estos tiempos de crisis sanitaria, una realidad social que empezó en un - ya lejano - 11 de Marzo - y que desde entonces está afectando a gran parte de la población y española, suponiendo una de las principales preocupaciones e incertidumbres en estos días.
Estoy hablando de la educación en tiempos de pandemia, una  educación y un sistema educativo - el nuestro -  que ha tenido que dar una vuelta de 180 grados en cuestión de días, lo que ha supuesto un reto para las comunidades educativas de miles de centros en nuestro país.

Con la intención de explorar este tema e intentar responder a las inquietudes de la población hemos invitado al programa a un novato orientador educativo de 27 años que ejerce en dos institutos públicos de la Comunidad de Madrid, que manifiesta que,a pesar de su corta trayectoria y vivir dos realidades totalmente distintas por los dispares contextos socioeconómicos de los dos centros donde trabaja, ha podido sacar conclusiones de este particular periodo, también en la educación...

Mateo - Hola, Daniel ¿qué tal?

Daniel - Hola, Mateo...muy bien. Primero de todo muchas gracias por invitarme y confiar en mí, habeis hecho una apuesta arriesgada  (Risas)

M - Seguro que despejamos más de una duda con esta charla, porque sabes que te enfrentas a un reto importante...la curiosidad de los oyentes

D - Sí, sé que hay mucha "sed" de respuestas en este tema e intentaré responder lo mejor posible a sus preguntas

M - Perfecto, Daniel...si te parece vamos a explicarle a los oyentes que nos escuchan que ahora mismo no estarán entendiendo mucho. Hemos recopilado algunas preguntas sobre educación en tiempos de pandemia que nuestros oyentes nos han dirigido a través de nuestra página web y con Daniel vamos a intentar darles luz a esas inquietudes...¿te parece que empecemos ya?

D - Fenomenal, Mateo...vamos allá

M - Andrea, de Madrid y artista está preocupada por aquellos niñas y niños que no tienen acceso a recursos informáticos y, por lo tanto, no puede acceder a los recursos que proporcionan los docentes ¿cómo habeis identificado esta problemática? ¿se ha hecho algo en este sentido?

D - Muy buen punto Andrea...si efectivamente este alumnado supone una de las grandes preocupaciones del sistema educativo. Al principio no fue fácil saber quien podía y quien no podía acceder a estos recursos y ha supuesto un gran trabajo de orientadores, profesores, profesores técnicos de servicios a la comunidad para ponernos en contacto con la mayoría de las familias y comprobar si esta situación se está dando. Gracias a este trabajo, podría decir que, actualmente estamos controlando la mayoría de estos casos y poniendole medida de diversas formas (entregar el material en físico, seguimiento por llamadas, etc.) pero aún así hay alumnos/as que se escapan y por eso se dan ciertas medidas como la necesidad de que esta situación no perjudique al alumnado con un suspenso, precisamente pensando en estos casos...pero hablaré de ello más adelante que seguro que tenemos más preguntas sobre ello

M - También a Andrea y coincide con ella Lucía una oyente madrileña que ejerce como Biologa les preocupa la situación de familias con problemáticas de violencia de género, u otras problemáticas familiares y pregunta cómo se está atendiendo a estos problemas desde la distancia

D - Este es un punto complicado...esta situación de distanciamiento social no nos permite realizar nuestro trabajo en las condiciones deseables y en estos casos se hace más notorio...no obstante, estas problemáticas normalmente las lleva en los institutos el profesor o profesora técnico de servicios a la comunidad. Este profesor o profesora, en mi caso es una mujer, se encarga de realizar seguimiento por teléfono a estos casos con la limitación de una llamada telefónica y lo que puede estar pasando detrás de ella...

M - Tema preocupante donde los haya...la última pregunta de Andrea es relativa a vosotros los y las docentes que, según comenta, es consciente de que están trabajando fuera de su horario, pregunta si ha habido quejas, si se cobra más por ello...

D - Aprovechando esta pregunta me gustaría recalcar el trabajazo que están realizando todos y todas las docentes como bien dice Andrea alargando y duplicando, en muchos casos, su jornada laboral por sacar adelante a su clase. Siempre hay personas de todo tipo pero la verdad que bajo mi experiencia y , aún pudiendo tener razón, no he percibido ninguna queja sino, al contrario, más ganas de trabajar y atender a sus alumnos en esta época dificil. Respecto a cobrar creo que, hablando de funcionariado, no hace falta responder...(risas).

M - Marta, trabajadora social también de Madrid, conoce de cerca la situación y se interesa por tu estado de ánimo en toda esta situación...dos institutos, recibiendo palabras nuevas de la Comunidad de Madrid cada dos por tres...

D - Bueno, Marta, gracias por preocuparte por mi: pues hay días la verdad...el trabajar sobre ya lo trabajado, debido a las distintas informaciones de la comunidad - a veces contradictorias como comentabas - es muy frustrante. Tenemos videollamadas constantes, llamadas, whatsapp que en ocasiones llegan a saturar, pero siempre piensas en todo lo que hay detrás de "esa tecla que estas pulsando" y eso te anima mucho y reconforta por lo que pensando en eso seguiré adelante.

M - También Marta, te pregunta sobre si crees que toda la carga de trabajo de videollamadas, reuniones que teneis son indispensables o crees que alguna se podría obviar de cara a un futuro después del confinamiento...

D - Bueno, realmente la carga de trabajo grande está suponiendo la organización de todo lo que va llegando...quiero decir, no estamos preocupandonos, por ahora, por el "después" si no en el futuro a medio plazo y que ahora nos ocupa el tema de la tercera evaluación, promoción y titulación del alumnado en estos tiempos. Por lo que sí, de momento, esas reuniones son muy necesarias.

M - Vamos con MariCarmen, pedagoga de Madrid nos pregunta sobre cómo esta siendo el trabajo diario de los alumnos y si crees que se están "escaqueando" y aprovechando esta situación para hacer menos trabajo

D - Pues hay de todo como en los tiempos de confinamiento...yo creo que el que normalmente aprovecha y quiere aprender lo hace ya sea en el instituto o en casa, adaptandose a la situación y el que normalmente "vaguea" también lo hará y quizá mas en su casa...lo que nos importa es que ningún alumno/a "no pueda estar accediendo a la educación", por así decirlo, ya sea por una falta de recursos o por situaciones familiares complicadas derivadas o no de esta crisis.

M - También MariCarmen pregunta por la realidad de las familias y si ayudan o no en esta situación estando encima de sus hijos/as o, por el contrario, están dificultando vuestra labor.

D - Esta pregunta es en la línea que he comentado antes...hay de todo. También nos encontramos con realidades diversas pero esto ya pasaba antes de esta crisis. Como ya he apuntado y me gustaría recalcar de nuevo, la preocupación máxima ahora es que esta crisis no esté acentuando - o en ocasiones creando otras nuevas- las realidades que ya atendiamos presencialmente y, por otro lado, seguir (de forma virtual) atendiendo a las realidades que ya atendiamos, como podemos...

M - Seguro que estais llegando a más de lo que pensais...vamos con Raquel, también pedagoga de Madrid que se interesa sobre el caracter inclusivo del que tanto se habla en el aula y si podríamos aplicarlo a esta situación también pudiendo hablar de una educación inclusiva

D - Bueno esto es uno de los grandes retos educativos pero ya antes de la crisis y acualmente no podemos asegurarlo porque desgraciadamente esta situación no nos lo permite aunque ya presencialmente es complicado, como he comentado...precisamente las medidas que se están tomando van en la línea de compensación de esas desigualdades que sabemos que existen...para que nadie se vea perjudicado.

M - También Raquel se pregunta sobre la preocupación de los y las docentes actualmente para-con los alumnos y alumnas y reflexiona sobre si deberíamos estar centrándonos en aspectos "más personales" y dejando un poco de lado lo puramente curricular 

D - Muy buena pregunta, pues es una polémica que está servida. Hace unos días leía un artículo que hablabla precisamente de esto y defendía la incongruencia de la escuela de estar preocupándose por "aprobar o no aprobar" en una situación tan dramática como la que estamos viviendo donde hay gente sin trabajo, gente muriendo y de la que no sabemos muy bien como saldremos. 
Personalmente creo que estamos haciendo lo que nos toca y preocupandonos por aquello que supone nuestro trabajo...no se nos puede criminalizar por ello, lo que no quita que sea un claro defensor, como orientador que soy, de "humanizarnos" un poco más y, aunque no olvidemos los contenidos y su importancia, atender a esas consecuencias emocionales, personales e incluso físicas en algunos casos con una llamada, una palabra bonita, un vídeo de ánimo, etc. creo que es fundamental que los alumnos y alumnas nos sientan cerca y que como un punto de apoyo. En los institutos donde trabajo estamos sacando adelante iniciativas donde queremos que trabajen sus emociones, conecten con la situación y sobretodo...aprendan de esto.

M - Qué importante es el aprendizaje de esta situación, si...también Raquel se interesa sobre la evaluación "a distancia" y cómo se va llevar a cabo teniendo en cuenta la situación actual

D - Antes de nada, esto es algo, como sabeis, que depende de cada comunidad dado que estamos en un sistema donde las competencias en educación están transferidas por lo que hablaré respecto a la situación que tenemos en la Comunidad de Madrid a día de hoy, en la que hace escasos tres días recibimos unas instrucciones que nos daban algunas claves importantes que luego cada centro adaptará de la forma que considere.  Fundamentalmente transmiten la importancia que hay que dar a las dos primeras evaluaciones frente a la tercera que en ningún caso será, por si misma, motivo de suspenso o repetición...esto, ¿qué esconde?, pues la idea que apuntaba antes de que tenemos que asegurar la equidad de nuestro sistema lo máximo posible, dado que esta crisis ya de por sí nos lo está impidiendo, habiendo (como ya hemos hablado) alumnos y alumnas que no pueden acceder a los recursos que el docente le proporciona. Dando un aprobado estás "minimizando" el impacto en esa "brecha de equidad" que se nos ha abierto debido a esta crisis, no sé si me he explicado...

M - Yo lo he entendido, esperemos que Raquel tambien (risas). Se me ha pasado una pregunta de nuestra oyente MariCarmen que preguntaba en esta línea qué opinas de la medida del aprobado general de la que se ha hablado estos días 

D - Esa medida no es cierta como tal, como he explicado es algo que la Comunidad "deja caer" de forma muy sutil pero también es posible suspender si existen las evidencias suficientes de que así tiene que ser pero nunca, recalco..NUNCA, esa repetición o suspenso, puede venir a consecuencia unicamente de la tercera evaluación...tiene que haber evidencias previas.

M - También MariCarmen está preocupada porque es consciente de la dificultad de los alumnos y alumnas a la hora de utilizar medios informáticos y pregunta cómo se está gestionando esto

D - Piues efectivamente nos estamos encontrando con este problema que nos revela la importancia de la educación tecnológica en este sentido, ya que pensamos que por ser nativos digitales controlan perfectamente este medio y no es así. Cosas como enviar un correo, adjuntar un archivo, etc. que puede ser tan corriente para nosotros para ellos y ellas no lo es aunque nos den mil vueltas en cómo hacer una "story" en instagram. Esto lo manejamos dificilmente, intentando que los padres, si es posible, les echen una mano o directamente haciendo tutoriales por teléfono (risas).

M - Volviendo a nuestra oyente, Raquel se interesa sobre la compatibilidad de la vida laboral y familiar al tener, los padres y madres, que teletrabajar a la vez que atender a sus hijos e hijas en sus deberes...

D - Rotundamente no lo es en demasiadas ocasiones...no soy padre pero conozco casos de compañeros y compañeras mías con hijos e hijas que no dan a basto, llegando incluso a "trasladar" su jonada laboral a la noche, dandose situaciones inhumanas como correos a las 4 de la mañana y cosas asi. En muchos casos la conciliación desgraciadamente no está asegurada...es algo con lo que tienen que batallar día a dia.

M - Juan Antonio, técnico de rayos madrileño, nos apunta una interesante cuestión y pregunta  si crees que está situación podría "desengrasar" los mecanismos educativos y mostrar nuevos horizontes en la educación española apuntando otras maneras de transmitir el conocimiento

D - Es una pregunta interesante si...yo creo que de todas las circuntancias se aprenden, sin embargo respecto al medio virtual y a distancia no creo que podamos aprender nada de forma directa...quiero decir, la educación a distancia es utópica...esas imagenes futuristas de profesores y profesoras tras una pantalla de ordenador dando clase estamos viendo que no son más que eso...una utopía. La educación es y debe ser algo más allá que la transmisión de conocimientos, una mirada, un gesto, una expresión muchas veces dicen mucho más que una nota y eso no se puede apreciar tras una pantalla de ordenador.
Más allá de  esto es cierto que hay puntos en los que podemos aprender como lo que apuntaba antes de que es necesario enseñar al alumnado a utilizar y hacerlo bien, recursos informáticos o la gran brecha digital que tenemos en la sociedad que, en el fondo, es una brecha social. Me encantaría que algo de esto haya calado en nuestros gobiernos y se hiciese algo a este respecto.

M - Juan Antonio también apunta que si esta situación está haciendo más autónomos al alumnado y esto tendrá repercusiones a futuro

D - Me encantaría creer que si, pero es pronto para decirlo..habrá que volver a las aulas y observar si algo ha cambiado, ya te digo que me encantaría que así fuese.

M - Otra de nuestras oyentes, Raquel madrileña y esteticien, pregunta sobre el alumnado con difiultades de aprendizaje como trastorno deficit de atención y cómo se está actuando con este tipo de alumndo.

D - Creo que lo he apuntado antes, estamos atendiendo a las situaciones que ya atendiamos presencialmente utilizando otros medios diferentes (videollamada, correo, llamada telefónica etc.) de esta manera hacemos un seguimiento de como lo están llevando y hacemos recomendaciones a las familias en estos días, etc. en definitiva es trasladar el departamento de orientación a tu casa.

M - Seguidamente tenemos a Raquel oyente madrileña que actualmente vive en Washinton y es psicóloga especialista en recursos humanos, que se interesa sobre si el sistema educativo (entendido como familias, alumnado, profesorado...) está preparado para la enseñanza a distancia 

D - Como he apuntado no es algo deseable, y aunque lo fuese nos estamos encontrando "trabas" en el camino que nos revelan lo poco preparados que estamos ante una situación como esta...tanto que todo ha sido improvisación "sobre la marcha" no había nada en papel sobre ello. La desigualdad de acceso en el alumnado a recursos tecnológicos, la poca formación docente en este sentido, la conciliación familiar...factores que han ido saliendo nos revelan que actualmente no estamos preparados para ello y en mi opinión, ni falta que hace (risas).

M - También Raquel reflexiona sobre la descentralizacion del sistema educativo español y sus consecuencias en esta crisis en el sentido de la disponibilidad de recursos desigual entre comunidades y su impacto en el alumando.

D - Efectivamente tiene consecuencias en el mismo sentido que antes apuntaba entre dos alumnos que no tienen igual acceso a recursos tecnológicos pero en distinto nivel. Esto nos lleva de nuevo de lleno a la idea de la equidad. Un sistema educativo debe asegurar el equilibrio entre la excelencia y la equidad es decir por ejemplo, debe asegurar que un alumno con pocos recursos pueda llegar al mismo lugar que otro con muchos...esta situación de por sí no lo está asegurando, lo estamos viendo entre alumnos...es un tema parecido hablando entre comunidades. 

M - Raquel también se interesa por la evaluación de las competencias clave más abstractas como pueden ser el compañerismo, el trabajo en equipo, etc. en un medio digital, si se está haciendo algo en este sentido y de qué forma

D - Pregunta muy interesante porque nosotros justamente en uno de los institutos donde tenemos un proyecto de ayuda entre alumnado estamos pensando en la manera de retomarlo de forma digital. Yo no tengo una idea clara sobre esto la verdad ya que como he dicho antes no me imagino - y no creo que sea deseable -  una educación digital pero la evaluación en este sentido tendría que limitarse a "la teoría" a través de cuestionarios y escalas que nos diesen una puntuación a través de preguntas relacionadas con esos aspectos que comenta Raquel...en mi opinión, se empobrecería mucho.

M - Siguiendo con Mónica una oyente de córdoba, auxiliar de farmacia que coincide con Silvia, madriñea y auxiliar de enfermería subrayandonos de nuevo la situación que muchas familias están viviendo normalmente y la posible acentuación de esas situaciones por esta crisis debido a la ausencia de recursos

D - Me gusta que haya tanta gente preocupada en este sentido porque para nosotros y nosotras también son la principal preocupación, trabajamos día a día por todos pero especialmente por los que más nos necesitan ahora...para llegar a ellos y, sobre todo, para que esta situación les perjudique lo menos posible.

M - Por otro lado, cambiando de tercio, Sara estudiante de medicina en Madrid, reflexiona sobre la educación superior y su organización...se queja de que está siendo nefasta y que están obviando la opinión del alumnado a la hora de evaluar...

D - Sara, entiendo perfectamente tu posición...la organización brilla por su ausencia en estos momentos "locos" y cada centro lo hace a su manera marcados por los ritmos que impone la Comunidad, en el caso de la educación superior aún hay más interrogantes por la mayor complejidad, no obstante desconozco este nivel por lo que no puedo decirte más...

M - Para finalizar Marijose, trabaja en una óptica y también nos oye desde Córdoba se pregunta sobre las consecuencias de estos meses sin clase tanto positivas como negativas

D - Me gusta finalizar con esta pregunta porque estamos mirando a futuro que yo creo que estamos pensando poco en ello...creo que es innegable que va a haber un impacto en el alumnado en estos meses sin clase, un impacto en el sistema educativo tal y como lo conocemos ahora...tras esta situación debemos flexibilizar los tiempos, partir de contenidos que no se han dado, atender a circunstancias particulares y, si somos flexibles y aportamos soluciones coherentes y ajustadas a las circunstancias saldremos ilesos de esta, estoy seguro. Respecto a los aspectos positivos en el terreno de la educación creo que se puede aprender mucho de esta circunstancia si te lo propones...podemos desarrollar la creatividad, la cohesión familiar, y muchos otros factores pero todo ello requiere acompañamiento familiar y determinación por parte de la escuela y las familias.

M - Muy bien, Daniel pues un ratito muy interesante el que hemos pasado...espero que hayamos resuelto las dudas de nuestros oyentes y también espero que todo vaya bien en los próximos días donde, como has indicado, la incertidumbre está a la orden del día. Gracias, de verdad por estar aquí.

D - Pues sí, espero haber aportado algo de "luz"  y gracias a ti Mateo, de nuevo, por confiar en mí. Si me permites, un saludo muy especial a mi familia, mis amigos/as y compañeros/as de trabajo, ¡nos vemos muy pronto! Adiós

M - Adiós, Daniel...y tras esto seguimos con...

Sunday 19 April 2020

Días 30 al 35: Extraordinariamente ordinario.

El ser humano es un ser adaptativo, un "animal racional" que tiende a normalizar las situaciones excepcionales que le ocurre, transformarlas y convertirlas en rutinas, en algo corriente y que acaba - incluso - siendo cómodo y confortable. Esto responde a que nuestro cerebro - el órgano mas sabio y potente que tenemos y que lo controla absolutamente todo - en la mayoría de las ocasiones tiende a evitar situaciones de desagrado, tristeza,añoranza etc. y prefiere transformar, en cuestión de tiempo, esos sentimientos por unos más agradables tomándose, lo que ocurre en el exterior, como algo más placentero de lo que realmente es...lo extraño, acaba siendo corriente; lo inusual, acaba siendo frecuente ;lo raro, acaba siendo conocido...lo extraordinario, acaba siendo ordinario.




...


    Si de algo nos está sirviendo esta experiencia es para demostrarnos esto, la capacidad enorme que tiene - tenemos - el ser humano para adaptarnos a absolutamente todas las situaciones, tanto es así que en situaciones tan desagrasables y extremas como un secuestro desarrollamos un síndrome  - que no sé si os sonará - de Estocolmo, en el cual llegamos a creer que tenemos una relación de complicidad con nuestro secuestrador - una de las "trampas piadosas" que nos hace nuestro amigo, cerebro y que nos ayuda a adaptarnos a esa (tan extrema) situación -.

    Lejos de querer comparar la situación actual con un secuestro, si es cierto que nuestro compi nos da dado una vuelta de 180 grados en nuestras vidas, trastocando absoultamente todo en torno a las mismas: relaciones personales, hábitos de trabajo, de sueño, relaciones familiares...todo ha dado un vuelco para ser repensado, reorganizad, reestructurado...para adaptarnos a la nueva situación.

Quién nos iba a decir a nosotros/as hace un mes que pasaríamos la Semana Santa, varios sábados por la noche, cumpleaños, aniversarios, reuniones familiares...en casa. 

    En mi caso particular hay bastantes "quiénmeibaadecir" pues, como ya os he comentado alguna vez soy bastante "culo inquieto" y paro poco por casa tanto entre semana como los fines de semana. De echo (para ser sincero) me produce - o producía - bastante ansiedad estar muchos días en casa seguidos y sin tener ningún plan o tarea a realizar. 

    Con esta experiencia he normalizado - e incluso puedo llegar a decir que disfrutado - el tiempo en casa, tiempo que (para seguir con la sinceridad) intento tener siempre ocupado y sin darme una tregua -  el disfrutar del tiempo sin hacer nada y poco productivo como aprendizaje futuro, poco a poco...-, también he disfrutado el tiempo en familia y realizar actividades con ellos que desgracidamente ultimamente no se producían mucho, he llegado a disfrutar de los fines de semana en casa imaginando - como os conté en la entrada anterior - mil y una formas de ocio "indoor"...en definitiva, he convertido en normal aquello que hace un tiempo ni imaginaba que podía serlo.

    Las rutinas que antes tanto me costaban, maldecía y daba mil vueltas en mi cabeza, ahora han llegado a ser parte de mi vida y he dejado de cuestionarlas tanto...simplemente las hago porque sí. Quizá por todo esto, esta vuelta a la "rutina confinada" no ha sido tan dura como fue el paso de la "rutina de verdad" a la "rutina confinada" hace ya un mes...eso y seguramente la elevada carga de trabajo postvacacional que me ha tenido los últimos días bastante ocupado...

- Levantarme - algo más tarde de lo habitual...uno de los aspectos positivos de teletrabajar.

- Sacar al perro en unas calles vacías...entrar a la tienda de prensa con un dependiente que tras una mascarilla me da los buenos días y me "lanza" las vueltas del periódico con miedo.

- Vuelta a casa y sentarme para comenzar la jornada de teletrabajo entre llamadas, correos, powerpoints, audios,etc.en una mesa del salón casi completamente colonizada por mí (con silla de oficina incluida, como podeis ver en la imagen).

- Sobre las 15 parar para comer y disfrutar una de las suculencias que mi madre prepara en estos días aprovechando que hay tiempo.

- Sacar al perro y aprovechar para oir/ hacer audios y responder mensajes de amigos/as.

- Tomar mi café y mi bollo en frente de la televisión durante, aproximadamente 15 minutos.

- Zambullirme, de nuevo,  en el trabajo (si queda algo por hacer) o seguir haciendo la programación de las oposiciones.

 - Aterrizar a las 20 horas, hora del esperado aplauso y charla vecinal.

- Hacer ejercicio "en solitario" con mi amiga, "la Patry Jordan".

- Sacar, de nuevo y por última vez, al perro en un Torrejón aún más desierto que por la mañana.

- Cenar restos del día o, si tenemos ganas y originalidad, alguna mezcla con gusto.

- Ver alguna serie, actualizar el blog, etc.

- Irme a la cama e intentar dormirme antes de la 1 AM.

    Esta rutina diaria se repite casi milimétricamente días tras día, algo que en un inicio me producía bastante agobio y ansiedad por su caracter estático y sedentario que nada va conmigo, la verdad...pero actualmente he llegado a aceptar y a veces, incluso, a disfrutar. Este carácter estático y poco cambiante hace que, como ya os comenté, cualquier cosa se magnifique a la categoría de "evento" y "rompa" esa estaticidad que a veces tan cuesta arriba, se hace. 

    
    A lo largo de esta última semana esos "eventos" han sido - a lo largo de la semana -  diversas llamadas y videollamadas, en el terreno laboral, las constantes regulaciones que la Comunidad de Madrid nos regala a diario sobre educacion y que, en algunos casos, se contradicen entre sí, así como la noticia de que nuestro confinamiento se alargará de nuevo hasta , al menos, el próximo 9 de Mayo. Noticia que, seguramente por lo que os hablaba al principio de esta entrada sobre la adaptabilidad, no ha sido tan dura como los anteriores aplazamientos. También esta semana, tuve una revelación al toparme en una de las salidas mañaneras con el perro con una tienda con un nombre en el que nunca había reparado y que ahora cobraba un significado especial "Good Luck Soledad" (pues, gracias - le contesté en mi cabeza al cartel - ).

    



  


    Al llegar el fin de semana los "eventos" se multiplican, ya que hemos continuado la "racha" de propuestas originales que empezó en Semana Santa y que este fin de semana nos han llevado a
continuar nuestras sesiones mañaneras con nuestra querida Patry, celebrar el cumpleaños de mi prima con una nueva edición del "Trivial familiar" acompañado con agua de Valencia, grabar un vídeoclip - de una famosísima canción - que quizá pronto sabreis - y que mi hermano está montando para un "Tu cara no me suena virtual" que va a hacer con algunos/as amigos/as suyos o hacer mi primera sorpresa de cumpleaños virtual, minuciosamente preparada y articulada para que todo saliese a la perfección la tarde del domingo tras los tradicionales aplausos. En definitiva, un fin de semana en el que irónicamente "no hemos parado", llevando un ritmo frenético de actividades que, aunque son "bajo techo" no dejan de tener el mismo caracter frenético que cuando las haciamos fuera.





    Sin embargo y aunque esta visión puede ser optimista - y ese es mi propósito fundamental - no hay que "confiarse", ser conscientes de la situación que estamos viviendo y que ésta puede seguir produciendo momentos de bajón, así como días que lejos de ver esta situación como normal, sea vista como lo peor que nos ha ocurrido en mucho tiempo. También hay que dar cabida a estos sentimientos, aceptarlos tal y como son y vivirlos como tal, sin recrearse demasiado en ellos para seguir con la misma energía que el día anterior en esta particular batalla que libramos día a día.

Tuesday 14 April 2020

Días 27 al 30: Eventos confinados.

    Si hay algo que está desarrollando esta experiencia es la originalidad. Esa cualidad personal, tan desarrollada por unos/as, añorada por otros/as, repudiada por otros/as tantos/as - seguramente algo "cuadriculados/as" - pero, en definitiva, una cualidad que nos deja con la boca abierta cada vez que se manifiesta en algún meme,GIF, reto, texto, imagen etc. que nos llega a los distintos dispositivos estos días.



    Puede decirse que gracias a esa originalidad en muchas ocasiones relacionada con el sentido del humor que tanto nos caracteriza a la población española - generalizando, claro...-, vivimos "pequeños ratitos de gloria" que nos sacan una sonrisa - y alguna que otra carcajada -  nos dan una razón más para pensar de forma optimista para pasar estos días o nos dan ideas sobre actividades, recetas - bollos, mayormente, quizá para equilibrar el "medidor de satisfacción personal (hablando en idioma SIM)" - juegos en familia, ejercicios para conservar la forma física - y bajar los bollos antes mencionados...- todo con un tinte "casero" que siempre está presente dada la situación en la que nos  encontramos, lo que aumenta a su vez el carácter original de todas esas propuestas. Estas propuestas alcanzan la categoría de "evento" la mayoría de las veces dado el caracter festivo y socializador que adquieren.

    Llamadlo originalidad o no, mi familia y yo nos hemos unido esta última parte de la "Semana Santa confinada" a estas últimas propuestas de actividades familiares "indoor" para intentar "pasar el rato" lo mejor posible. Todo empezó, realmente, hace una semana aproximadamente, cuando os contaba que decidimos unir "fuerzas virtuales" - a través de Skype - con mis primas para hacer ejercicio juntos capitaneados por la gran Patry Jordan (entrenadora virtual y bloguera bastante conocida, por lo visto, y digo "porlovisto", ya que yo no estaba metido para nada en este mundillo que se antoja "mundazo" en muchas ocasiones al darte cuenta de la variedad de canales, productos, ejercicios, materiales, etc. que existen y puedes utilizar para mejorar un poquito tu cuerpo).

    Estas "quedadas virtuales" nos permiten pasar un rato en familia, distraernos durante, al menos, una hora y, además, combatir el sedentarismo al que puedes caer fácilmente en esta situación. Por esto seguramente, nos animamos cada vez más y -  probablemente, debido a que estos sentimientos eran comunes a mis primas - fuimos buscando otras alternativas para pasar "más ratos" a lo largo del día.

    De esta manera, me planté en el sábado, día 27 de confinamiento, donde - en la línea de toda la semana santa, la verdad... - me levanté animado y con ganas de hacer cosas, así que como rutina instaurada que ya era, nos plantamos a las 12.30 en frente de la televisión y del ordenador - para poder seguir la rutina de la ya bautizada "La Patry" - y de la tablet - para conectarnos con mis primas - y pasamos una hora aproximadamente "cultivando el cuerpo" en grupo.

 
     Después de esto, nos duchamos y comemos como parte de la rutina vacacional de la semana santa
que nos permite flexibilizar un poco nuestras vidas - dentro de los límites que ya tenemos impuestos -. Ese día por la tarde tocaba un poco de programación - que, como ya os he contado, estoy perfeccionando (aprovechando que las oposiciones se han aplazado al año próximo y el confinamiento) y una llamada amigos que, como siempre, supone una bocanada de aire fresco y renovado que tanto necesitamos y por las que muchas veces yo soy capaz de distinguir si estamos en fin de semana o no. Después de ello, cercanos a la hora de comer y con un ligero sentimiento de "bajón" por pasar (de nuevo) otro sábado en casa me vine arriba y propuse en el grupo de Whatssapp de primos si se animaban a un bingo virtual y...¡oye!,¡Dicho y hecho!.



    Unos pocos minutos bastaron paea que me pusiese una peluca de "binguera" y mi hermano y yo organizasemos el juego (que es tan fácil como una bola virtual de las miles que hay en internet y una hoja de papel y bolígrafo para dibujar un tablero, por persona) y nos conectasemos con mis primas...vino en mano, para ser totalmente sinceros. A lo largo de las partidas me dí cuenta que lo que menos importaba era realmente el juego, y cobra importancia los comentarios, las risas, las bromas...esas cosas que nos demuestran que ,a pesar de todo, seguimos siendo sociales, disfrutando de ello y, sobretodo, que la gente a la que queremos sigue estando ahí. Por esto, fundamentalmente, pasamos una noche muy entretenida que me hizo olvidarme de la situación que estamos viviendo y, tanto por lo primero como por lo segundo, ya merece mucho la pena sacar a relucir un poco la originalidad.


     El domingo (de resurrección - de Cristo, porque la "nuestra" va a tardar un poco más...) y tras nuestra habitual rutina tocó el culto al cuerpo, por la tarde también, pero esta vez materializado en una sesión de belleza con mi prima - que es estilista - de la mano. Una rutina completa de lavado de cara, limpieza, mascarilla (a base de miel y limón - quien me diría que tendría más usos que juntarlo con agua y curar el dolor de garganta - ), serúm, crema hidratante, etc. desembocó en unos cutis con textura de "culitodebebé" y me preparó para , de nuevo, una sesión nocturna de videollamada que me hizo irme a la cama para "resucitar" por dentro y por fuera un lunes con sabor a "final de semana santa" que no impidió que siguiésemos cultivando el "instinto original", esta vez con un Trivial familiar por parejas - esta vez acompañado por un "agua de Valencia" en nuestra mano -  que hizo que me sintiese en cualquier programa de la televisión actual con tantas pantallas en mi televisión y ¡yo formando parte de una!.


    No gané, sinceramente, pero si gané una noche más sin darme cuenta de que estabamos confinados y eso, para mí, es lo que cuenta -¡qué mal perder tengo! (nah, es broma....) -.

    De esta manera tan original, finalicé mis vacaciones confinadas con miedo al día siguiente, martes (donde se cumple ya un mes de confinamiento), más que nada por la hora de levantarme...debido a que mi sueño esta bastante trastocado y es dificil seguir horarios fijos, pero la verdad que "amanecer" costó mucho menos de lo que esperaba y retomé de muy buena gana mi "semirutina" como ya he bautizado, de "sacaralperrocomprarlaprensayvueltaacasa" y sentarme frente al ordenador para comenzar mi rutina de trabajo que se antojaba de "vuelta a la realidad" y retomar temas que se quedaron a la mitad antes de las vacaciones.

Entre unas cosas y otras el día ha pasado volando, y aquí me encuentro, a las 12 de la noche escribiendo estas últimas líneas de mi día, un día de retomar, volver, reencontrar hábitos que - aunque nos neguemos a pensar - ya forman parte de nuestra (confinada pero confiada) vida...¡quien nos/me lo diría un mes antes!.

Friday 10 April 2020

Día 26: Carta a mi abuela.

Fuerte como pocas, protectora, valiente, luchadora, solidaria, amable, alegre, con algo del mal genio, empoderada, moderna, creyente, familiar, bondadosa, cocinera inigualable...

    Estos, entre otros adjetivos, podrían definir a mi abuela, una persona con la que mantenia un vínculo especial...recuerdo especialmente los veranos en el pueblo depertándome y viéndola ya metida en faena limpiando el patio o la entrada de la casa, los momentos a la hora de comer done degustaba uno de sus deliciosos platos (pipirrana - una especie de sopa/caldo hecho de pepino, tomate, cebolla y aderezada con vinagre -, cocido, paella y un largo etcétera), las charlas - que yo disfrutaba muchísimo -  hablando de su pasado o los abrazos cuando nos volvíamos a ver despues de un tiempo largo.

    Hoy, 10 de Marzo, hace 2 años que nos dejó: una partida, un viaje definitivo...que es lo más bonito y más duro que recuerdo en mi vida ; ya que igual de duro, por lo inesperado, fue, como bonito porque nos permitió estar juntos toda la familia hasta que falleció, ya que pasó unos días en el hospital ingresada.

   Como parte de mi vida que ha sido, es y seguirá siendo siempre, merece un espacio en este blog, ya que en innumerables ocasiones he imaginado como habría sido vivir esta situación con ella, que seguramente habría vivido con nosotros, en mi casa. Por todo esto y, si tuviese que escribirle una carta a día de hoy dirigida donde quiera que esté, sería algo así...


...


Hola abuela, 

¿Qué tal estás? espero que todo vaya fenomenal, estés bien rodeada y te estén cuidando mucho. 
Yo he sacado un rato - sabes que siempre estoy hasta arriba, pero estamos viviendo una situación que nos ha obligado a parar un tiempo, luego te cuento...- para escribirte y contarte un poco qué ha sido de nosotros/as todo este tiempo. Primero de todo decirte que te echamos mucho de menos, has dejado una ausencia en la mesa, en las comidas familiares, en tu sillón del salón, en tu casa...y sobretodo, en nuestros corazones, pero no me voy a poner "pegajoso" que sé que no te gusta en exceso...

Por aquí estamos bien, aunque ha habido algunos cambios...yo actualmente trabajo en lo que me gusta, sí abuela, por fin lo conseguí...¡qué orgullosa hubieras estado! y empezando a pensar en la independencia que espero que llegue pronto porque aún sigo presentandome a las oposiciones para conseguir plaza fija - poco a poco...-, mi hermano Hugo sigue en el proceso  de cambio de género que le dejaste y ya es él casi totalmente, está muy feliz y nosotros/as porque él lo esté, ahora está estudiando educación infantil y mis padres bien, siguen con sus trabajos y los tíos y las primas igual, también muy bien...abuela, no veas que guapo y rubio está el primo pequeño al que solo tuviste oportunidad de tocar a través de la barriga de Gema, su otra hija, no deja de crecer y apunta maneras, es una niña listísima, como ya sabes...

¡Ay abuela!, si estuvieras aquí...como te decía al principio, estamos viviendo una situación loca, no hay precedentes de esto y todo es una improvisación...verás, resulta que un virus (no te digo el nombre porque no sabrias pronunciarlo aunque si estuvieses aquí nos hubieramos echado unas risas...) procedente de China para el que no tenemos anticuerpos se ha extendido por todo el mundo hasta el punto de que ahora es pademia y claro, los Gobiernos para pararla tienen que tomar medidas y, entre ellas, está la de estar "confinados" - confi...¿qué?, dirías - si confinados, encerrados en casa y así llevamos un mes y ¡lo que nos queda!... te imagino pronunciando tu indignado ¡pues vaya plan! - llevándote la mano derecha a la babilla en signo de artazgo - y es que, efectivamente, es un plan bastante inusual y desagradable.

Esta siendo duro, abuela, en especial para mí que soy un culo inquieto, Hugo, como imaginarás, está feliz (sonrisa) y mis padres están deseando poder salir para ir a su amado apartamento de Canet (que no llegaste a conocer...), pero bueno, sabes que sentido del humor y optimismo no nos falta, estoy seguro que saldremos de esta aunque hemos tenido "baches" en el camino que nos han arrebatado algo de optimismo y humor, como el fallecimiento del abuelo Atilano, que ya estará por allí contigo, dale recuerdos...

Dicen, abuela, que esto es una guerra contra un enemigo invisible y qué cierto es...los supermercados arrasados de comida, hospitales de campaña, las calles desiertas...cuántas veces me acuerdo de tus frases sobre la comida: "dásela a los gatos", "dejalo para la noche", "haz un revuelto" u otras escusas para no tirarla, tú si que sabías de guerras y, sobretodo, de luchar incansablemente...¡cuánto nos hubieses enseñado en estos momentos!

En fin, no me quiero poner excesivamente meláncolico porque, como te he dicho, estoy seguro de que esta saldremos y espero que reforzados...me voy despidiendo, sólo decirte que te tenemos muy presente e intentamos preservar - aunque a veces nos despistemos - los fuertes valores que nos dejaste, nos vemos en mis sueños

TE QUIERO, ABUELA.


Thursday 9 April 2020

Día 23,24 y 25: Naturaleza.

Fíjate bien en un vídeo de cualquier calle, plaza, monumento, etc. vacío en estos días...¿qué es lo único que se mueve?

...

¡los árboles!



    Con este - aparentemente simple - razonamiento, que una amiga me hacía en una videollamada estos días, comenzó una charla sobre uno de los temas que últimamente da vueltas en mi cabeza: el papel de la naturaleza en toda esta situación "tan loca" que estamos viviendo gracias a nuestro "compi".
 
    Una situación en la que día a día nos llenamos de imágenes de calles, rincones y plazas vacíos - esperad,vacíos...¿seguro?: según cualquier programa de televisión, noticiero o periódico que se preste, la respuesta es, sin dudarlo : sí, producto - seguramente - de nuestro egocentrismo humano, que nos lleva a pensar que somos el centro del  planeta tierra e incluso, del universo.

     Árboles, arbustos, flores, césped, tierra, fuentes, setos, maceta, jardineras, ramo, estanques, lagos, pájaros, palomas, cuervos y un largo etcétera de elementos - que quizá desconozca siquiera sus nombres - conviven entre nosotros/as y ahora, sin saberlo, han cobrado todo el protagonismo aunque ni ellos - por la carencia de intelgencia racional - ni nosotros/as - por el egocentrismo que os comentaba - lo reconozcamos. 

    Esta reflexión "se coló" en unas vacaciones de Semana Santa que, como ya os comentaba en la anterior entrada, se avecinaban atípicas por la situación actual. En concreto tuvo lugar la noche del martes "santo" - día 23 de confinamiento - en el que amanecí bastante animado y con ganas de seguir la rutina de ejercicios mañaneros que nos hemos "autoimpuesto" mi familia y yo - acompañados por mi prima de forma virtual (por aquello de que el sufrimiento compartido, es menos sufrimiento) - y la entrenadora personal e influencer "Patry Jordan" (que ya es parte de la familia, prácticamente, aunque a veces la odiemos por su ánimo y felicidad constante hasta en los momentos más duros de la rutina) y que me está sirviendo muy mucho como entretenimiento y, de paso, mantener la actividad en estos días tan sedentarios. 

   
Previamente a esto, como ya forma parte de mi día a día, saco al perro, compro el pan y alguna pequeña cosa que necesitemos para el día - todo ello "aderezado" con largas colas de gente, que hacen que los recados se alarguen en el tiempo hasta la hora en la que empieza la sesión de ejercicios, las 12.30...sentadilla aquí, sentadilla allá, flexión por aquí, luego una tabla "para descansar" (según nuestra querida Patry) - ¡maldita tabla! -un poquito de zumba y calentamientos para finalizar, protagonizan nuestras "santas" mañanas, durante una hora aproximadamente, momento en el que iniciamos la ronda de duchas para mitigar "los efectos" de las rutinas en nuestros cuerpos.

    Tras esto, un vermut - que nos da la sensación de vivir en un domingo constante - y comemos...todo ello bañado con vino que -porqué no decirlo- es una alegría y capricho diario que debemos darnos a nosotros/as mismos dentro de esta situación que, en ocasiones como ya sabemos,se antoja dificil.

    Por las tardes y dado que, aunque de momento no hay nada oficial, las oposiciones sean seguramente aplazadas al año que viene, estoy aprovechando para hacer una revisión de la programación (la segunda parte del examen que supone la elaboración de un "trabajo" sobre las actividades del departamento de orientación en un curso escolar) y dejarla lista para que el año que viene solo me enfrente, puramente, al estudio...todo ello precedido por un café con "rosquilla y galleta" - todo creaciones "confinadas" de mi madre y hermano - y alguna otra tarea que tenga en el día.

    De esta forma me planto todos los días en la otra cita obligada (y esperada) del día, las 20...hora del aplauso-homenaje sanitario y, aprovechando la salida a la ventana, la charla con los vecinos donde compartimos comentarios y risas, tan necesarias estos días. Por la noche, aprovechamos, como ya comenté, para hacer cosas en familia y esta semana tocaba ver vídeos de cuando eramos más pequeños, rato que se convierte en un festival de recuerdos, risas, anécdotas, vergüenzas...que me ha hecho redescubrir el "Daniel del pasado" que tan diferente es al de hoy.

    Pero el martes tocaba algo distinto...pues tenía la cita virtual a la que me he referido al inicio de esta entrada, una cita que decidimos horas antes que fuese de disfraces (os dejo el resultado en foto) y donde recorrimos muchos temas entre los que se encontraba el que da nombre a esta entrada, desencadenado por la - aparentemente simple - frase que pronunció mi amiga.

  

    Este tema, nos llevó parte de la velada y nos dejó conclusiones como la que os he compartido: el caer en la cuenta de que las ciudades no están vacías o , consecuencia de lo anterior, la necesidad de darle un papel protagonista a la naturaleza, idea en la que quizá resida una de las claves para comenzar a cuidar nuestro planeta, así como el aceptar que somos egocentristas por naturaleza, lo que nos lleva a pensar que estamos solos, somos dueños de lo que nos rodea y a obviar la necesaria convivencia con esos otros "elementos naturales" tan importantes. Dentro de todo el razonamiento que seguimos, planteé incluso la posibilidad de que el virus hubiese sido "lanzado" por alguna asociación ecologista para retrasar los efectos del ser humano en el planeta que últimamente - antes de la llegada de nuestro compañero, claro...- han protagonizado gran parte de las noticias y vaticinaban consecuencias en el medio-plazo para el planeta. 

   Quizá esto sea una "ida de olla" mía, producto de las horas en las que estábamos pero lo cierto es que con las noticias que nos llegan - aguas cristalinas en Venecia, eliminación de la boina de contaminación en Madrid, animales tomando las calles y las playas de gran parte de nuestras ciudades... - parece como si el mundo estuviese "respirando" y "desintoxicándose" una temporada de nosotros/as y la incongruencia que esto supone pues, como parte de la naturaleza, deberíamos convivir en armonía con todos sus elementos sin necesidad de "respiros" entre nosotros.
En fin...ojalá reflexionemos un poco sobre todo esto y cambiemos, aunque sea mínimamente, algún hábito de lo que nos distancia de lo que somos realmente y lo que, por otro lado, nos ha asegurado el pasado, nos asegura el presente y , si cuidamos, nos asegurará el futuro.

Con estas ideas y otras - sin mucho sentido -, producto de desvaríos varios y reirnos de la vida, me fui a la cama con el subidón, de nuevo, de haber compartido un rato socializando, aunque sea de forma virtual.

    El miércoles, de nuevo nos enfrentamos a "la guerra mañanera de Patry" esta vez más corta ya que a las 13 tenía una reunión virtual con la comisión LGTBI+ del Consejo de la Juventud de la Comunidad de Madrid, a la que pertenezco como parte de la asociación scout de Madrid por lo que fue una mañana la mar de entretenida entre unas cosas y otras y que me llevó de forma muy rápida a la hora de la comida, momento en el que mi "montaña rusa personal" comenzó a descender inexplicablemte y me mantuvo en un punto muy bajo gran parte de la tarde y la noche - estoy aprendiendo a llevar estos momentos mejor, limitándome a aceptar que es un momento malo y con la esperanza de que "mañana" sea de otra forma e intentando no darle más vueltas que eso, dejando de intentar animarme con cualquier cosa, ya que en esos momentos nada (o muy pocas cosas) lo hacen... - momento en el que volvimos a bucear en el pasado, esta vez reviviendo eventos familiares como la comunión de mi hermano o su actuación en el coro del colegio cuando estaba en sexto de primaria.

   
Y así, avancé en la Semana Santa, llegando a uno de sus día grandes, el jueves santo (día 25 de confinamiento),día grande que sólo se notaba porque las calles estaban - aún más, si cabe - silenciosas, debido a que había más cosas cerradas y los establecimientos tenían más - aún más si cabe, también - colas. Factores (el estar parado esperando en una cola y estar rodeado de silencio) que me hizo volver a la idea con la que he comenzado esta entrada y dar importancia al sonido de los pájaros, en el que reparo muy pocas veces. Después de ello, el entrenamiento con Patry diario al que se sumaban más adeptas (mi tía y mi prima, hermana de una de las que ya era "frecuente") que aumenta motivación al momento. 

   


 Después de esto y disfrutar una auténtica "comida de día grande": fideuá, se produjo el gran subidón de los últimos días que me llevó a "otro techo" de mi montaña rusa emocional particular, ya que me llegó un regalo personalizado que unas amigas me hacían para darme ánimos por los últimos acontecimientos sucedidos. De nuevo, pequeños grandes gestos que agradezco eternamente y hacen que esta particular "lucha" se lleve mucho mejor y que te anima a seguir hasta que el compañero decida dejarnos por, al menos, un tiempo.

   





 Por delante, el final de esta Semana Santa tan extraña y que, de nuevo, nos deja alguna que otra incertidumbre como la situación de la educación y las oposiciones, en qué condiciones seguirá el estado de alarma o hasta cuando se alargará pero sigamos "tirando" de "viejos conocidos" como optimismo, rodeandonos (virtualmente) de los que nos recargan y aumentando nuestras ganas por hacerlo absolutamente todo cuando volvamos a la normalidad.

Monday 6 April 2020

Días 20,21 y 22: Cartas al hospital.

 (Por Whatsapp)
- Dani, ¿te puedo llamar?
- Si, claro...cuando quieras
(El móvil suena a los 5 minutos y lo cojo al instante...)
- ¡Hola! ¿Qué tal, cómo estas? ¿Cómo va tu madre?
- Hola, Sara...pues bien, intentando llevarlo como podemos. Mi madre mucho mejor, gracias...ya no tiene fiebre y apenas está cansada, todo va mejor, ¿tú qué tal?
- Yo bien, también, gracias. Te llamaba porque necesito que me des el contacto de una profesora porque necesito hablar con ella para una iniciativa sobre unas cartas que estoy poniendo en marcha entre los alumnos de mis clases...
- Ahora te lo paso, pero, un momento...¿en qué consiste la iniciativa?
- Pues están escribiendo cartas para los pacientes de coronavirus ya que están muy solos porque solo pueden recibir la visita de un médico al día. Ellos las escriben, me las envían y después yo las enviaré a los hospitales por correo electónico.
- ¡Qué bien! Y..¿qué te parece hacerla extensiva a todo el instituto?, puedo hablar con mi compañera de Orientación y ver como lo hacemos...
- Pues me parece genial, Dani...yo te puedo pasar los contactos de los hospitales, si quieres...





...


    Con esta conversación de hace ya unas semanas, con una profesora de uno de los institutos donde trabajo - actualmente comparto funciones en dos institutos -  de no más de 10 minutos, comenzó una de las mejores - y más bonitas andaduras - en mi corta experiencia como Orientador educativo pues, entre nuestras funciones, está la de adaptarnos a la realidad del contexto sociocultural donde se sitúa la institución educativa en la que nos encontramos y, a través de esto y aprovechándolo, llevar a cabo acciones con los distintos integrantes de la comunidad educativa, con el objetivo de hacer lo que, en definitiva, estamos llamados a hacer...educar.

    Y esta iniciativa, tenía todos los ingredientes necesarios: adaptada a la situación que estamos viviendo, destinada a enseñar y desarrollar valores tales como la solidaridad, empatía, tolerancia, etc., involucra y anima a la comunidad educativa a colaborar por un bien común, etc. Por todo ello - descubierto y mucho más que nos quedaba por descubrir -  en cuanto colgué el teléfono me puse a hacer llamadas a mis compañeras de ambos institutos para ver como podíamos articular la iniciativa - ¡Qué chulo, Dani!...pues si quieres podemos hablar con los/as tutores/as y hacerlo con su ayuda, ¡Me parece genial!, quizá podamos hacer un documento para pasarle a los/as tutores/as y que se lo pasen a los/as alumnos/as,... - y una serie de propuestas de distintas compañeras, que no hicieron más que apoyarme en esta iniciativa. 

   Y es que, una de las cosas que me he podido percatar en esta trayectoria en el mundo de la educación, es la gran calidad humana y profesional y la enorme entrega de muchos y muchas de los/las profesionales que están dispuestos/as a tender una mano en cualquier momento, trabajar más allá de sus horarios, arriesgar, adaptarse a distintas circunstancias a una velocidad de vértigo - como estamos viviendo actualmente - por el mero hecho de enseñar a sus alumnos y con esto, mucho más allá de enseñar contenidos, enseñan esperanza, tenacidad, trabajo...entre otros muchos valores.

    De esta forma, desde el Plan de Acción Tutorial (uno de los planes en los que se articula nuestra labor en los institutos que se basa en la colaboración con los/as tutores/as y la hora de tutoría de la ESO) emprendimos esta iniciativa - llamada finalmente "Cartas al hospital" -  en ambos institutos...una iniciativa que me ha dado mucho más que trabajo - redacción del documento para que los tutores/as se lo enviaran a los/as alumnos/as, escribir los correos para los tutores/as, creación de carpetas en la nube para que los tutores/as me las pudieran enviar, recibir más de 100 cartas entre los dos institutos, con la consiguiente revisión de las mismas para comprobar que cumplían con los requisitos de formato, anonimato, destinatarios no conocidos, etc. y su posterior envío - la reafirmación de que la educación a los/las alumnos/as debe ser el instrumento más valioso que tienen las sociedades para cambiarse a sí mismas, por algo mucho mejor.

    Esta iniciativa concluía en medio de este fin de semana, el tercero del confinamiento, que enfrentaba con un ánimo mucho mejor que la semana pasada, que podemos calificar como la "horribilis" de toda esta experiencia. Creo que a la vez que soy bastante sensible y cualquier evento en mi vida puede provocarme esa montaña rusa emocional de la que os hablaba hace unos días, también me crezco antes las dificultades - quizá como parte de mi "impronta scout" - y suelo salir bastante rápido de esas "descendidas" de la montaña rusa. 

    Quizá por esto en este fin de semana - que se presentaba triste y duro, por la reciente pérdida vivida y el hecho de enfrentarme después a unas vacaciones sin un entretenimiento importante que supone mi trabajo - pude darle un poco la vuelta y dedicarme a intentar pasar más tiempo, si cabe, en familia para animarnos mutuamente que, en estos días, he descubierto que es uno de los recursos más potentes que tenemos. 

    De esta manera, amanecí el sábado animado y con ganas de enfrentarme a mis "quehaceres" mañaneros que, durante los fines de semana y los próximos días de vacaciones, a parte de la compra de la prensa, sacar el perro y comprar el pan, se extienden a comprar algunas cosas necesarias en el mismo establecimiento en el que compro el pan. A la vuelta, me esperaba una noticia que no contribuía al "trabajo emocional" del día, ya que el Gobierno anunciaba que el estado de alarma se extendería, al menos 15 días más...lo cual, para mí suponía doble noticia ya que, al hecho de que se extendiera el estado una quincena más - ya desesperanzadora de por sí - se sumaba que las oposiciones esperadas para Junio de este año, se aplazaban hasta la misma fecha en 2021, con la consiguiente sensación de "tirar a la basura" todo el trabajo hecho hasta la fecha - ¡Dani, vas a ir más preparado!, no es trabajo en vano...ya has adelantado mucho, lo vas a clavar el año que viene, ya verás... - intentaré quedarme con los comentarios que me hace la gente al conocer la noticia.

    A pesar de ello y debido a una llamada de una amiga que actualmente vive en Alemania, mi ánimo no decayó - eso,  y que probablemente ya me esperaba la noticia desde hace unos días...- y me permitió vivir un sábado bastante agradable y desconectado, incentivado por el momento cartas que viví, después de comer, ya que a pesar de que llevabamos dos días no lectivos debido a las vacaciones de Semana Santa aún seguí recibiendo cartas de alumnos que lejos de molestarme por suponer trabajar un día más, con cada recepción de cartas me venía más arriba y me llenaba aún más de esperanza...

    Esperanza por una juventud y adolescencia que esta sociedad se empeña en criminalizar y tachar con adjetivos tales como: vagos, con falta de creatividad, esclavos de las nuevas tecnologías, irrespetuosos, con falta de valores sociales y un largo etcétera que yo me niego a aceptar y, gracias a iniciativas como estas, puedo reafirmar mi postura, ya que, a pesar de encontrarme con cartas que claramente dejan entrever que han sido hechas con cierta dejadez...la gran mayoría muestran compromiso por la causa, la demostración de unos valores sólidos e intención verdadera de apoyar y dar ánimos a aquel/aquella que más lo necesita. 

    En definitiva, he podido redescubrir el gran valor humano - que, he de reconocer que en algún momento me ha llegado a sorprender quizá por el influjo social - que nos empeñamos en arrebatar y reluce en los momentos más necesarios - tanto es así que a día de hoy sigo recibiendo cartas y me estoy planteando un nuevo envío -. 

   Transmitiendo esta experiencia personal que - gracias a mi profesión - he podido descubrir, tengo el firme objetivo de pedir, desde este humilde "escaparate" que supone el blog, que empecemos a confiar un poco en los/as adolescentes y quizá, con nuestra confianza de su lado, y mediante los medios adecuados y atractivos para ellos/as, descubramos cosas alucinantes como las que nosotros/as hemos podido observar con esta iniciativa - ¡Casi lloro, Dani!, Me los como, qué calidad humana...estoy flipando, Me han sorprendido, etc. - eran algunas de las las reacciones que los profesores/as me transmitían estos días.

    Con este subidón de ánimo que esta inicitiva me ha dado en repetidas ocasiones estos últimos días, disfruté una tarde y noche de sábado, como las demás, entre aplausos, charlas familiares y un improvisado "trivial" por la noche.

    El domingo (de ramos) - día que normalmente es bastante tristón - amanecí con mejor ánimo que el resto de domingos vividos en el confinamiento y me dispuse a hacer cosas en casa que normalmente, por falta de tiempo, no puedo hacer...recoger los papeles de la habitación, hacer limpieza de ropa, etc. y tras una mañana bastante activa...me dispuse, de nuevo después de comer, a concluir la iniciativa que habíamos emprendido semanas antes, haciendo el envío a los hospitales a través de correos ,en los que más allá de sumarme a los ánimos y apoyos al personal sanitario y pacientes hospitalizados que transmitían las cartas, quise transmitir también la idea que os comentaba antes sobre la gran aceptación y entrega en la iniciativa por parte de nuestros/as alumnos/as...¡porque ellos/as se lo merecen!.

    De esta forma concluyó nuestra iniciativa y con ella, un fin de semana que dejaba entrever una Semana Santa atípica que viviríamos desde casa y en la que las procesiones, la playa, la montaña, cualquier ciudad de Europa (o del mundo), entre otros destinos que son elegidos en estas fechas para el periodo vacacional, serán sustituidos por dosis grandes de "casa" y "actividades indoor" que seguirán retándonos personalmente y demostrándonos a nosotros mismos que podemos seguir adelante y sobrevivir en las circunstancias en las que nos encontremos por muy inhóspitas que nos parezcan en un principio.

Friday 3 April 2020

Días 15 al 19: Oscuridad.

Representada como un encapuchado con una guadaña, es una "extraña conocida" que siempre nos pilla de improvisto, por mucho que esperemos su visita...siempre sabe como tocarnos lo más profundo que tenemos y dejarnos como desprovistos, abandonados y sin un rumbo fijo. Cuando, desgracidamente, recibimos su indeseada visita parece que todo deja de tener sentido y que "cuesta y duele continuar". Una "visita definitiva" que, cuando pensamos en ella, nos empeñamos en dar sentido pero cuando llega nos damos cuenta de el poco sentido que tiene para la proyección de vida que todos pensamos donde el fin no está contemplado ni, si quiera, pensado. Una visita para la que, en definitiva, estamos poco preparados. Sí, hablo de...la muerte.





...


     Esta, probablente, sea la entrada más dificil de todas las que he escrito en mis dos experiencias blogueras. Estos últimos días he estado desaparecido porque no ha sido, ni de lejos, la semana más fácil de todo el confinamiento provocado por nuestro "compañero", de hecho ha sido la peor, donde ha pasado lo peor que podía pasar. En un primer momento, dudé mucho en compartirla aquí y, simplemente, tratarlo como un "parentesis" en la cuarentena, un periodo en el que había habido simplemente "vacío" pero eso no es lo cierto, no ha habido "vacío" si no "oscuridad". Siguiendo con el símil de la entrada pasada, ha sido como si la montaña rusa de repente entrara en un túnel muy largo que ha durado varios días, un túnel que sólo te proporcina oscuridad, ganas de pasarlo para ver qué hay al otro lado y confusión - ¿Qué ha pasado para estar aquí?, ¿Cuándo acabará?, A partir de ahora ¿todo irá igual que antes o algo cambiará? -.

     Pero, ahora, pasados unos días y con una perspectiva un poco más objetiva, creo que, como parte de todo esto, esta semana tiene que estar aquí, por lo que vayamos al principio de la misma...

    El lunes , día 15 de confinamiento, amanecí, tras un domingo nada fácil, con la misma sensación de bajón, no obstante a lo largo de la mañana esa sensación fue pasando, mientras me embarcaba en la "aventura orientadora" que todos los días depara algo nuevo y emocionante, esta semana seguía inmerso en las cartas al hospital que ya os contaba en otras entradas y de la que ya os hablaré en un futuro...una iniciativa gracias a la que estoy "sobreviviendo" psicologicamente estos últimos días.

    Con un estado de ánimo mucho más positivo nos dispusimos a comer y, después, me embauqué en el estudio tradicional de la tarde que me llevó, esta vez, a repasar las posibilidades académicas y profesionales de los adolescentes españoles y cómo debemos afrontarlas desde la orientación educativa, tema que me sirvió de distracción y me hizo olvidarme de todas las malas sensaciones de los últimos días...así, con un ánimo bien distinto al de la mañana y, sobretodo, al del día anterior, acabé mi lunes.

    El martes amanecía con un ánimo mucho mejor al del día anterior a pesar de que fuera llovía, lo que provoca que sacar al perro, ir a por la prensa y una nueva tarea adquirida: comprar el pan (que antes provocada otra salida "innecesaria") sean menos prácticas, debido al cúmulo de cosas "que se mojan" en las manos va en aumento y llego a mi casa al más puro estilo "michelín" sacando cosas por debajo del abrigo y con el consguiente "malabar" para secar al perro antes de que entre en casa.

    Pero "aventura bajo la lluvia" pasada, me dispuse a teletrabajar y recibí, a las pocas horas, una noticia que me provocaría un subidón considerable - como ya habréis comprobado esta experiencia magnifica las emociones negativas pero, también, las positivas...¡eso me encanta! -,ya que me llegó la noticia de que la baja que estaba cubriendo en los institutos desde el pasado Octubre, se alargaría, al menos, hasta el próximo 4 de Mayo, por lo que la sonrisa apareció en mi cara y me proporcionó motivación para rato - la montaña rusa llegaba a su máxima altura, de nuevo -.

    Sin embargo, la montaña rusa aguardaba (después de esa gran subida) un túnel, como os comentaba antes...un túnel que, hasta la fecha en esta experiencia, no había cruzado y era desconocido para mí, un túnel que me retaría de nuevo a mi mismo y me llevaría a descubrir otras nuevas formas de afrontar situaciones en esta situación tan extraña que nuestro "compi" nos ha proporcionado...ya que, esa noche nos llegó la noticia de que mi abuelo, que llevaba varios dias ingresado en el hospital y parecía que iba mejorando, había sufrido una recaída que había llevado a los médicos a empezar a sedarle.

    En ese momento, retrocedí un tiempo atrás...en concreto, hace dos años cuando recibí la misma noticia de mi abuela materna y, de nuevo, se me tambaleó el mundo, mi mundo...más de lo que ya estaba por el dichoso compi, porque en ese momento no había optimismo que valiese, todo era oscuridad, confusión, miedo, preguntas y un sinfin de emociones negativas que no dejaban pensar con claridad...y ahora, ¿qué? - me preguntaba - una pregunta que, si ya ocurre cuando recibes este tipo de noticias en situaciones normales, ahora con más intensidad pues gestos tan usuales como abrazar a alguien al que quieres, dar un beso, tocar etc. no pueden producirse...incluso el hecho de "acompañar" al ser querido hasta el último momento y así poder despedirte en condiciones, no es posible.

    A pesar de este "amasijo" de emociones negativas, pude conciliar el sueño, más tarde que pronto, y amanecí el miércoles bastante confuso y con ganas de ir al hospital, pero...no era posible. El teletrabajo fue de aquella manera, esperando, durante toda la mañana, una noticia que era esperada a la vez que temida. Esta sensación de confusión y espera que, en ocasiones, llevaba a la desesperación nos llevó a mi hermano, mi padre y yo a ir al hospital después de comer. Una decisión que, pese a quizá no ser la mejor en el momento que estabamos viviendo, fue lo mejor que pudimos hacer pues nada más llegar y poder darle un beso, falleció.

    Después de eso, las imágenes se me agolpan en la cabeza...la situación - que ya, de por sí, no es nada agradable - se le sumaba, la pandemia que estabamos viviendo y la imposibilidad de besarnos y abrazarnos como nos apetecía...a lo que yo me limitaba a dar la mano con un gesto compungido y , entre todo eso, el "ilegal" abrazo a mi abuela que no pude resistir.

    Tras la visita a "cuentagotas" y escalonada de toda mi familia, salimos del hospital dirigidos a casa de mi abuela donde desinfectamos limpiando la misma, para que estuviese más segura con una de mis tías que pasaba la noche allí, para no dejarla sola en ese duro momento. Allí, exactamente igual que en el fallecimiento de mi abuela dos años atrás, viví un "momento mágico" donde el ambiente de la casa parece distinto, como si ya te avisase de que faltaba algo, hasta lo veía de otro color y olor.

    Más tarde, a las 20, salimos a la terraza parte de la familia y aplaudimos...pero esa tarde, los aplausos que siempre van dirigidos hacia los sanitarios, ese día cobraban otro sentido para mí...esa tarde tambien iban hacia él. 

    Tras todo ello, volvimos a casa con una mezcolanza de sentimientos - tristeza, por la pérdida, descanso, por habernos despedido de él, pena por no haber podido demostrarnos el cariño con un beso o un abrazo, etc. -. y, así, nos fuimos a la cama dispuestos a seguir luchando en el túnel en el que, de repente, nos habíamos visto encerrados.

   Los días siguientes, jueves y viernes, siguieron siendo de "oscuridad"...el compañero había tomado un segundo plano y ahora lo importante era estar juntos y apoyarnos, los que podíamos hacerlo que era mi familia más cercana. No obstante, hoy viernes parece que vamos viendo la luz y el otro lado del túnel después la oscuridad gracias al cariño y apoyo familiar y de amigos y amigas que recibimos , de forma telefónica o virtual...a todos/as ellos/as nuestro más sentido agradecimiento ya que aunque lejos les hemos sentido muy cerca.

    Después de estos días, nos enfrentamos a una Semana Santa nada usual ni alegre y alejada de la usual emoción que despierta en mí, debido a ser un apasionado de las procesiones...pues esta vez ni las circunstancias ni el ánimo, acompañan, de momento.

    Pero debemos seguir, seguir porque sabemos que, después de todo, se fue en paz y rodeado de todos los que le queríamos - de la forma que podíamos hacerlo - y con el cariño que el transmitía cuando estabamos junto a él. Por ello, consideré que debo escribir sobre esto, como forma de homenajearle humildemente, esta entrada se la dedico a él...


...sí,a ti, abuelo.